Top 10 cosas que aprendí durante el primer año de mis bebés

Por: Mariví 
Finalmente tu bebé va a cumplir un año. Esa personita que hace 12 meses esperabas con ansias locas y que en tu cabeza tenías todas estas ideas y expectativas acerca de a quién se parecería, cuáles serían sus papillas favoritas y todos los lugares a donde la llevarías, finalmente va a cumplir un año. Y claro, a todo el que te pregunte dirás que ha sido el mejor año de tu vida y que no hay absolutamente nada que cambiarías de estos 12 últimos meses de tu vida. Pero la verdad sea dicha, estás exhausta, llena de amor pero exhausta. Y pesar que probablemente sí han sido los mejores 12 meses de tu vida, hay cosas que si pudieras volver a vivir sí cambiarías y que definitivamente haz aprendido durante este primer año (o por lo menos hablo de mi). Permítanme compartirles una parte de mi listado de cosas aprendidas durante los primeros 12 meses de vida de mis bebés:

1. No es bueno fijarse en lo que hacen otros bebés.

De verdad, cada bebé es distinto y cada bebé llega a hacer cosas en diferentes momentos. Que el hijo de tu mejor amiga se haya reído a las 2 semanas de nacido y el tuyo a los 2 meses no significa nada. Solo sigue tus instintos y si notas que hay algo raro siempre consulta a tu médico. Aparte que tu médico también te dirá si ve algo raro. Y de paso ignora (o más bien pégale) a la persona que te pregunta que porqué tu hijo no está caminando todavía a los 11 meses y que de repente deberías de llevarlo donde un especialista.

2. Si de vedad quieres tener una vida remotamente normal y verte aunque sea un poquito descansada pon a tu bebé en un horario y una rutina.

En serio. Si bien es cierto que los bebés tienen necesidades, vamos, seamos sinceras, un horario y una rutina no le hace daño a nadie y tu bebé te lo agradecerá. No digo que vas a ponerle un horario al mes de nacido, pero a medida que van creciendo lo pones en una rutina y a dormir en su propia cuna. Ambos, tu y él, se merecen dormir bien.

3. Encontrar personas que te cuiden a tu bebé es LO PEOR.

Ya sea que tengas nana, un familiar o esté buscando la mejor guardería, pasarás horas entrevistando gente y cuando crees que por fin lo lograste entrevistarás a mil gente más. No vale la pena quejarse por esto porque vivirás en una eterna queja.

4. Tu bebé se va a caer.

Sí. Lamento traerte a la realidad. No importa que tan pendiente estés o cuántas veces hayas jurado que a ti jamás te pasará eso porque estarás tan pendiente que no le quitarás la vista ni por un segundo, tu bebé se va a caer. Es hora de enfrentar la realidad. Repite en voz alta conmigo: «MI BEBÉ SE VA A CAER». Ya. ¿No sientes que te quitaste un peso de encima al aceptarlo?

5. ¿Juguetes caros para el bebé? Nah!

Los mejores juguetes son el control de la tv (que por cierto si le sacas las baterías es mejor para que no te desconfiguren la televisión), envases de plástico, cajetas, cucharas, papel para forrar regalos, etc. Todo esto los mantiene entretenidos como por 1 minuto (lo cual he aprendido que es bastante para un bebé, créanme).

6. ¿Hacer álbumes perfectos? IMPOSIBLE.

El que logre hacer el álbum del bebé de primer año entero ES MI HÉROE. En verdad. Merece las llaves de la ciudad o algo así (como mínimo). Claro que todas tomamos mil fotos y empezamos escribiendo cada día el «agugutata» que balbuceó esa mañana pero na ah! Imposible llegar al año habiendo llenado el álbum de fotos y escribiendo todo. No pasa. Simplemente no. Y ya que estoy en el tema, agréguenle el tomarle las fotos mensuales con las figuritas que tienen el número de meses y cantarle el «cumple mes» con dulce y todo. Really? O sea no. ¿Quién tiene tiempo? Al final terminaba haciéndolo los días que no eran disq porque me había saltado un mes. 🙈

7. He descubierto la droga para los bebés. Y lo mejor, es legal e igual de adictiva. Sí. Aunque usted no lo crea son los «snacks» de Gerber llamados Puffs.

Ten cajas de eso en tu cartera. Es más, lleva una maleta de Puffs donde sea que vayas. Hazme caso en esto.

8. Las bacterias existen.

Están en todas partes y por más antibacterial que compre y más lavado de manos que haya en mi rutina las bacterias existen y un bebé se lleva todo a la boca. Imposible estresarme por esto.

9. A pesar que mis amigos de Facebook e Instagram quieran mostrar que la llegada de sus bebés fue color de rosa y que todo es bonito y perfecto, admito que la llegada de mis bebés no fue así.

Hubo muchos momentos en que me sentí triste, agobiada, abrumada, desconectada, perdida y enredada. Es más, hubo más momentos en que me sentí así que los que me sentía feliz, aliviada y en control de la situación. Tener un bebé es duro. Muy duro y nadie te prepara para esto. Lo que aprendí fue a respirar, tomarme un cinco y seguir sabiendo que cada día que pasa la cosa mejora y que al final del camino sí será la mejor experiencia de nuestras vidas.

10. CUÍDATE. Repito CUÍDATE. Durante el primer año de embarazo querrás cuidarte tomando anticonceptivos, con el método del ritmo o cualquier método que te funcione y en el que creas.

No creo que quieras tener que ir a la farmacia, cargando un bebé de 3 meses a solicitar que te den todas las pruebas de embarazo posibles y pasar el susto de tu vida mientras piensas que vas a tener otro bebé tan seguido. O sea dos bebés a la vez.

Y mientras creo que algunas me odiarán por este post otras estarán agradecidas por decirlo porque créanme somos más las que lo pensamos y pocas las que lo aceptamos. Y ya que estoy en esto tengo que aceptar que no quiero «detener el tiempo» como escucho a gente decir y no quiero «que se queden bebés para siempre» porque si bien ea cierto que cuando son bebés son deliciosos y super cutes, a medida que van creciendo se vuelven super emocionantes y cada etapa es caóticamente hermosa.

¡Cheers!